TRAYECTO X

Cuerpo tarántula inserto tarjeta en ranura bus. Un chófer cobra me cobra de menos. Incrédula compruebo descuento y VENGA! grita seco su codo tatuado. Voz resorte impulsa mi culo a su asiento y desierta mi boca asiste triste a un involuntario silencio. Tribales y rosas pueblan negra tinta en piel de lagarto tostado cemento. Desierto ventana escucho azul cielo conversa el hombre del grito. Macho al volante narra cuentos y leyendas urbanas a un comprensivo comparsa. Anarquista autobusero hace paradas free style y deja tirados desolados peatones. Recoge, eso sí, a un militar con cara de simio que más tarde resopla a mi espalda. Conductor insano narra entusiasmado aventuras policiales, suicidios de secretas, denuncias y sindicatos, y voz escupitajo nos salpica espumarajos, pitidosy requiebros con su voz caverna. "EL AVIÓN NO ESPERA A NADIE" se justifica incrustando el morro a un coche ignorante. Atravesamos isla e historias. Momento parada pasada de largo. Sonrisa diabólica. Viaje en el tiempo. Un peatón decidido recogido en autostop se le ha adelantado al autobusero de mente flácida, que de nuevo le deja tirado, con un mosqueo que le dura lo que una pestaña en una mano. Comparto su breve triunfo y me uno a su risa torva.
Despide hombre desierto a su amado partener. Parada obligada. Turistas preguntan cosas de turistas y escupen sarna. No comprenden.
Llegamos rectos a la puerta de Salidas. Volar. Volar muy alto. Aquí estoy. Maleta rota y mochila en mano. Nervios y malentendidos. No preguntar. No oir. Confundo una puerta. Mal menor. Sentada detrás de una tocaya que dibuja tacones. Sueño pesadillas y dibujo muertos de algodón. Planeo planes y hago esquemas, vidas soñadas de mí y para mí. Paisajes abiertos. Por si acaso, no miro por la ventana, por si el vértigo de allá afuera supera en vacío a mis abismos.

No hay comentarios: